En la actualidad, los tratamientos más efectivos para conseguir una sonrisa perfecta y unos dientes alineados son dos: los brackets, viejos conocidos que ya llevan décadas creando sonrisas en niños y adultos y un nuevo protagonista: Invisalign, mucho más discreto y que, como todo, tiene sus ventajas y desventajas.
Elegir entre estos dos tratamientos no es una decisión que deba realizarse a la ligera. Por eso, es necesario analizar cada caso particular previamente y elegir el método más apropiado de forma personalizada. Los brackets funcionan ejerciendo una presión en los dientes a través de varios elementos (el bracket, el arco y las virutas), Invisalign endereza los dientes mediante unos alineadores transparentes que, poco a poco, van moviendo los dientes hacia la posición correcta ejerciendo presión sobre los dientes mediante pequeñas modificaciones en la posición de los dientes.
Como norma general, los brackets son más económicos que Invisalign, pero nos reiteramos: todo depende del tipo de problema y paciente en cuestión. Analizaremos cuáles son las principales características de cada tratamiento para así poder entender mejor el presupuesto que cada uno de ellos lleva asociado.
¿Cuál de los dos es más efectivo?
Ambos tratamientos ofrecen garantías y ambos son efectivos a la hora de alinear la dentadura. Cambios que también requieren controles periódicos al menos cada 6 o 10 semanas. Controles que se llevan a cabo para garantizar que el tratamiento está siendo efectivo o si es necesario ajustar el aparato para ver nuevos avances.
Los brackets, a diferencia de Invisalign, son tratamiento fijo. Es decir, una vez colocado sólo puede ser retirado por el especialista. Esto supone que el paciente lo llevará las 24 horas del día. Algo que puede parecer una desventaja pero que se convierte en ventaja si atendemos a efectividad y compromiso con el tratamiento.
Algo que no sucede con Invisalign, que es un aparato removible que debe llevarse al menos 20-22 horas todos los días. Y precisamente en esa ventaja está el posible problema. Si el paciente no cumple con las horas mínimas, el tratamiento puede tardar más tiempo en realizar elefecto deseado.
Es por eso que muchos pacientes o padres de estos pacientes piden directamente que el tratamiento elegido sea el de los brackets. Y no solo porque sea más económico, sino porque asegura que el paciente mantendrá el aparato puesto las 24 horas del día.
¿Cuánto dura un tratamiento con brackets? y con Invisalign?
Ambos tratamientos duran aproximadamente el mismo tiempo. Este tiempo dependerá primigeniamente del estado inicial. Obviamente no es lo mismo alinear unse dientes que únicamente tieneenen una ligera desviación, que unose altrse, en la que la mayoría de los dientes se encuentran apiñadesde.
Por eso existen planes de tratamiento cortos en los que únicamente se busca enderezar los dientes frontales y con los que se puede conseguir un buen resultado en unos 6 meses y otros, en los que el tratamiento puede durar entre uno y dos años.
Esta prolongación en el tiempo no sólo puede deberse a una alineación incorrecta dese estructuras dentales sino que los huesos delos maxilares también entran en juego. Y en estos casos el proceso se puede prolongar notoriamente.
¿Cuál de los dos tratamientos es más cómodo?
Invisalign es más cómodo que los brackets por el simple hecho de no contener piezas adheridas a los dientes que puedan causar molestia a las zonse tovse de la boca. En cualquier caso, con el paso del tiempo, la propia boca se va moldeando y adaptando a ambos aparatos y las molestias son mínimas.
Los brackets suelen ajustarse cada 4 semanas, a diferencia del Invisalign que se ajusta aproximadamente cada 10 días pero no hace falta ir a la consulta sino que lo hace el paciente en casa cambiando los alineadores. Como norma general, una vez colocado, la presión que se siente en los dientes desaparece a las 48 horas.
Otro de los aspectos que puede añadir una ventaja a Invisalign es que ofrece mayor “oferta” a la hora de poder alimentarse. Con los brackets, ciertos alimentos como las cosas duras o chicles están totalmente desaconsejados porque pueden causar daños en el aparato. Invisalign en este aspecto, al poder retirarse, es más flexible.
Invisalign se nota menos que los brackets
Con los brackets las estructuras colocadas en los dientes y los soportes de metal quedarán visibles al sonreír o hablar. Invisalign, está realizado con un material “de plástico” totalmente transparente, por lo que nadie notará quien le lleva. Este dato hace que sea el tratamiento de elección, sobre todo, para niños y adolescentes que viven en una etapa en la que la autoestima y la importancia del físico se acentúa.
En cuanto a la higiene dental, los brackets son más complicados de limpiar por el simple hecho de que hay más rincones y resulta más difícil acceder a toda la boca. Invisalign se limpia con un cepillo de dientes de forma sencilla para, después, realizar la higiene dental habitual completa con cepillo, pasta e hilo dental.
¿Cuestión de precio?
Aunque por norma general, el tratamiento con brackets es más económico que Invisalign, en los últimos años el precio de ambos se está equiparando notablemente. Por eso sólo queda evaluar el caso particular de cada paciente para poder decidir, según el estado de su boca y sus características concretas, qué tipo de aparato es mejor para cada uno.
En la actualidad el precio de los brackets se sitúa aproximadamente sobre unos 2.000€ y el precio del Invisaling ronda los 3.500€. Dependiendo del caso en cuestión.
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